10 mandamientos de Squash: mejora tu juego con estos consejos

raqueta squash

Los Diez Mandamientos de Squash son consejos esenciales para cualquier jugador de squash. Si los sigues, tu juego mejorará en todos los sentidos.

En 1974, Geoff Hunt, ocho veces campeón del torneo del Abierto Británico, proclamó lo que serían los “10 Mandamientos de Squash”. Desde entonces, han surgido algunas variaciones. Algunos entrenadores profesionales como Hunt Richardson y Cicelia Prudent, por ejemplo, han actualizado la lista.

Aunque desde la primera proposición de los mandamientos de squash, raquetas, pelota, reglas y otros elementos han sufrido cambios, los siguientes consejos permanecen esencialmente intactos. Si sigues estas reglas, es muy probable que tu juego mejore en todos los sentidos.

1. Golpea la pelota hasta el fondo de la cancha: Cuando estás detrás de tu oponente, terminar es esencial para devolver la pelota con profundidad. Apunte alto, por encima de la línea de servicio, para que la pelota pase la casilla de servicio. Esto mantiene al oponente detrás de ti.

2. Apunte las esquinas traseras de la cancha: Es allí donde tu oponente tendrá el mayor desgaste, después de todo, tiene menos área para golpear y opciones de movimientos. Es allí donde está más alejado de la posición central de la cancha (T) y, en consecuencia, puede dominarlo.

3. Mantenga la pelota “pegada” a las paredes laterales: El mejor movimiento es un paralelo recto, cerca de la pared lateral. Esto hará que tu oponente corra más rápido. También reduce sus opciones. Es decir, tendrá que volver a jugar en paralelo, lo que le permitirá anticipar más fácilmente. Finalmente, tu oponente también tendrá más dificultades para devolver bien el balón.

4. Domina la posición central de la cancha (T): Golpea la pelota, regresa a T. Desde allí, puedes alcanzar casi todos los movimientos del oponente. Más del 60% de ellos, puedes llegar en un solo pase. En otras palabras, esto ahorra esfuerzo, reduciendo el desgaste en el arranque. Cuando los jugadores tienen un nivel similar, aquellos que dominan la posición central tienden a ganar el juego. Practica esto con y sin raqueta. El entrenamiento del movimiento es esencial.

5. Siempre mira la pelota: No todos los jugadores tienen este hábito, pero toda la información sobre el juego está en ese punto. En niveles más principiantes, es común no tener la costumbre de mirar la pelota. Pero créeme, adoptar este hábito cambiará tu juego para mejor. Debes mirar la pelota en todo momento. Es decir, cuando hace contacto con su raqueta y el oponente, así como cuando está en la parte inferior de la cancha. Así es, no apuntes a la pared frontal esperando el movimiento de tu oponente. Mira su ritmo mirando la pelota. Todo esto mejorará tus reflejos y capacidad de respuesta en el juego.

6. Haz correr a tu oponente: Puede parecer obvio, pero la elección del juego no siempre refleja la posición del oponente en la cancha. ¿Quién nunca tuvo el paralelo disponible y eligió una cruzada? Sucede en la vida de cualquier jugador de squash. A pesar de la regla máxima (en el número 1) que dice “pelota al fondo de la cancha”, debes vigilar a tu oponente para saber dónde está. Después de todo, después de una buena jugada en profundidad, si él no regresa a la T a tiempo y usted acorta el balón, tendrá que recorrer la distancia más larga en la cancha. Es decir, se desgastará más.

Correr en la cancha implica un movimiento muscular explosivo. Además, el jugador no siempre llega en las mejores condiciones, lo que puede provocar errores no forzados o retornos imprecisos, lo que facilita su vida. Así que siempre se consciente de dónde está tu oponente. Lanza la pelota lejos de donde está y corre en la cancha.

7. Juega volea siempre que sea posible: Cuando la pelota se presente a la volea, no tenga dudas, anticipe y ejecute esta jugada. Después de todo, esto disminuirá el tiempo de recuperación y reacción de tu oponente. Además, te mantiene en la posición central de la cancha y al oponente bajo presión. La regla básica es: volea con profundidad hasta que aparezca la oportunidad de una volea corta. Pero no trate de “matar” la pelota cada vez que aparezca la oportunidad de volear.

8. Sepa cuándo retrasar el juego: Disminuir el tiempo de reacción del oponente es esencial para presionarlo. Esto puede suceder a través del voleibol o con más velocidad en la pelota. Sin embargo, a veces es importante reconocer el tiempo para mantener el ritmo. Es decir, retrasar el movimiento. Esto puede dejar a tu oponente sin saber lo que vas a hacer. Pronto, su equilibrio de movimiento se verá afectado. Haz que espere tu movimiento y luego haz que corra lo más lejos posible. “Parar” y “correr” todo el tiempo provoca fatiga y desgaste durante el juego.

9. Aprende a acortar la pelota: La regla número 1 es “pelota al fondo de la cancha”. No pierdas de vista eso. Sin embargo, la variación en el juego también es importante. Aprender a acortar la pelota, o tocar la famosa “curtinha” o soltar es esencial para el repertorio. Estos dos movimientos combinados, cuando se juegan bien durante todo el juego, ganan partidos. Aun así, no olvides que juegas primero con profundidad, y luego piensa en acortar el juego.

10. Cambia el ritmo del juego: Varíe la velocidad y la altura de sus movimientos. Esto rompe el ritmo del juego. Es decir, mantiene a tu oponente adivinando lo que vas a hacer, rompe su ritmo y te ayuda a recuperarte cuando estás cansado. Cuando está fuera de posición frente a la cancha, un globo, por ejemplo, puede ser efectivo para ahorrar tiempo y volver a T.

 

Los consejos para jugar mejor siempre son útiles, en cualquier nivel. Los Diez Mandamientos de Squash son una guía interesante para reflexionar sobre el rendimiento individual y los hábitos de cambio en el juego. Además de los puntos presentados, hay otras reflexiones importantes que pueden plantearse en ese momento.

Primero es pensar en la comida. Es decir, come inteligentemente. No todos deberían seguir la misma dieta. Cada uno tiene un estilo de vida y objetivos diferentes. Por lo tanto, siempre consulte a un buen especialista en nutrición para satisfacer sus necesidades. Sin embargo, el hecho es que la comida influye en el rendimiento deportivo.

Segundo, reflexiona sobre tu evolución en Squash. Hay al menos dos elementos involucrados en este deporte. Es decir, lo físico y lo mental. Estudia tus fortalezas y debilidades, así como las de tus oponentes. A partir de ahí, establece metas y objetivos factibles para tu nivel de juego. No se apresure, tenga su propio ritmo. Es normal pensar que en ciertos momentos, no estás progresando. Pero esto es parte del proceso, créeme. Siempre busque orientación de maestros, amigos y videos en Internet.

Finalmente, nunca olvides que Squash es un juego. Así que siempre diviértete. Perder o ganar, concéntrese en los aspectos positivos del deporte. Después de todo, cada jugador de squash conoce los beneficios que la práctica recurrente de esta actividad física aporta al bienestar y la salud. No lo use como fuente de estrés, sino como una forma de liberación.

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